El Equipo Fundador: El carácter y la oportunidad de diferenciarse.
Si no lo haces tú, lo harán por tí.
Hola, soy Carlos de Otto. Ayudo a financiar Startups desde Startupxplore. He creado un par de empresas en el camino.
Estás leyendo Senda, mi publicación semanal, para aquellos que se enfrentan al reto de emprender.
Carlos.
Decíamos la semana pasada que en la Idea empieza todo, y así es. Alrededor de esa idea, un pequeño grupo de personas van a conformar el equipo fundador.
Este grupo va a ser determinante para con el camino que tome la Startup. Y no, no hablo del resultado, eso depende de muchas otras cosas. Hablo de la personalidad de los fundadores como elemento clave para que la empresa pueda competir, diferenciarse y sobrevivir.
Vamos a ello.
Supervivencia: Las personas y los conflictos
Como me decía Jesús Encinar en su día, las Startups solamente cierran por falta de caja o por conflicto entre los fundadores.
Las personas somos personas y me temo que, el conflicto entre los fundadores, es común, y se resuelve como todas las relaciones personales: Difícilmente.
Para elegir las personas adecuadas no existen fórmulas mágicas me temo.
Para minimizar el daño, que no evitarlo, os recomiendo dos cosas:
Que lo que pactéis quede todo por escrito, incluso antes de constituir una sociedad, para que no haya malentendidos.
Que lo que pactéis sea fácil deshacerlo. La legislación española no ayuda, pero hay despachos especializados que tienen experiencia en estos temas.
Supervivencia: El carácter para tomar decisiones.
La empresa se va a enfrentar a situaciones límite varias veces. Vuestro carácter para enfrentaros a ello va a ser determinante.
Toda Startup, tras las emociones del arranque, pasa por una fase muy dura (la travesía del desierto), que superarla no es el final del camino, ni mucho menos, pero es el principio de algo con cara y ojos.
Es en esta fase donde no todo está en contra. Hay buenas señales, pero no son definitivas. El problema es que tampoco hay señales contundentes del desastre.
La empresa se convierte en un zombie que no acaba de avanzar, al que se le acaba el dinero, donde tú no ves claro que vas a sacar de todo esto. Nadie lo ve. Es más, a veces tiene sentido dejarlo en este punto.
En este período es donde es posible que surjan problemas en el Equipo Fundador: disparidad de opiniones, de objetivos personales...
Requiere de una mezcla de ingenuidad, aversión al riesgo y perseverancia que los fundadores deben tener. Y donde se darán momentos épicos de vida o muerte (de la empresa se entiende)
Llega el momento de la batallita:
En 2010 habíamos conseguido nuestra segunda rondas de inversión importante, y estábamos estancados en 500,000 usuarios al mes. Competíamos ya con Spotify.
La cosa no pintaba bien, llevábamos 3 años y medio de proyecto, y se empezaban a poner de manifiesto las diferencias entre los fundadores. No sólo sobre la estrategia a seguir, (quizás lo más importante) sino que las personalidades empezaban a aflorar e influir (lo más destructivo).
Tuvimos que tomar decisiones dolorosas: forzamos la salida de uno de los fundadores, pivotamos a un producto en el móvil, cambiamos de modelo de negocio, re-estructuramos el equipo y cambiamos de oficina. Básicamente la empresa cambió completamente en 5 meses después de casi 4 años.
Esto ocurre en casi todos los proyectos y vuestro trabajo es superar estas situaciones y resolverlas.
Exige mucha resistencia y resiliencia y vuestro carácter va a determinar si los podéis afrontar o no. Por último, superar estas situaciones tampoco garantiza el éxito.
La diferenciación para poder competir
Ahora algo ilusionante, algo sobre lo que construir.
Vuestras personalidades y motivaciones, se van a ver reflejadas en todo lo que hacéis: en vuestro producto, en atención al cliente (o la falta del mismo), vuestra comunicación, estética, marca...todo., lo hagáis intencionadamente o no.
Hagamos que sea intencionado. Es vuestra oportunidad de ser diferentes y muy difícilmente copiables.
Para conseguirlo, debéis ser conscientes de vuestra diferencia. Analizad lo que hacéis bien, lo que no tanto, lo que os gusta, las fortalezas y carencias.
Una de las maneras de comprenderlo es viendo cómo hacéis las cosas. Sois más de vender o techies, sois más de operaciones o financieros?
Cuando lo averigüéis, haced de ello vuestra cultura, y demostradlo con vuestros hechos, porque se acabará reflejando en vuestra marca.
Para ilustrar hasta qué punto os podéis diferenciar, por vuestra manera de ser, voy poner un ejemplo universal: Un bar.
¿Qué diferencia hay entre el bar de la esquina donde ponen cañas y cafés, bocatas y menú del día, versus el bar de moda de cocktails y tacos mexicanos. Es el presupuesto? Es la ubicación? Es el local? No, son los dueños.
Los dos sirven comida y bebida, pero lo hacen de manera completamente diferente. Los dueños de uno podrían montar el otro? No. No va con su naturaleza, no sabrían copiarlo. No les saldría.
Nos centramos siempre en qué vamos a construir para competir, y la gran diferencia reside en como lo vamos a hacer.
Los clientes nos eligen por nuestra manera de ser
Como fundadores, vuestra manera de ser, también va a determinar qué perfil de cliente tenéis. Y eso no lo puede cambiar ninguna agencia de branding.
Hay un ejemplo paradigmático que ilustra esto: Apple versus Microsoft.
En Microsoft tenían ADN de ingenieros, de programadores: por eso vendían un sistema operativo funcional, que iba en hardware de terceros. El PC les daba igual mientras fuera compatible y no fallara.
Apple vendía un sistema operativo pero incluía su propio hardwdare. Eso es porque pensaban en el producto final, no en sus partes. Pensaban en la experiencia del cliente.
Con cualquiera de los dos tenías un ordenador con sistema operativo funcionando, pero cómo enfocaban el problema daba resultados muy diferentes.
Microsoft con los años acabó siendo una herramienta corporativa, mientras que Apple acabó en manos del consumidor final.
Esto le permitió a cada uno competir con lo que mejor hacía, y encontró su perfil de cliente.
Sed conscientes de lo que sois como equipo, haced las cosas a vuestra manera y contadle al mundo cómo y porqué lo hacéis así. Vuestros clientes comprenderán la diferencia.
El mercado, el contexto, la suerte…todo eso ayuda, o no, pero el equipo fundador es el dueño del destino de la Startup, tanto para destruirla como para hacerla única.
Suerte en la travesía.
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